Juliana Jiménez Velandia de Convergencia Hub en el Summer SCENE Programme 2024 de la Universidad de Oxford y la Cumbre T20 del G20
- Juliana Jiménez Velandia
- 24 dic 2024
- 3 Min. de lectura
En un contexto global cada vez más urgente en materia de cambio climático, la Universidad de Oxford, a través de su Smith School of Enterprise and the Environment, financió la participación de un selecto grupo de jóvenes líderes del Sur Global en el prestigioso Summer SCENE Programme 2024. Este programa de alto impacto reunió a líderes emergentes de diversas regiones, entre ellos Juliana Jiménez Velandia, fundadora de Convergencia Hub, quienes tuvieron la oportunidad de participar y elaborar recomendaciones políticas en un policy brief, que fueron presentadas en la Cumbre T20, celebrada en noviembre de 2024 en Brasil. Este evento de gran relevancia congregó a centros de investigación y think tanks de los países miembros del G20 y naciones invitadas.
El Summer SCENE Programme fue un espacio fundamental de encuentro para voces emergentes que, a pesar de las dificultades históricas y estructurales del Sur Global, supieron articular propuestas innovadoras, inclusivas y sostenibles frente a la crisis climática global. De este modo, las recomendaciones presentadas por la cohorte del Summer SCENE Programme 2024 fueron un reflejo del compromiso de los jóvenes del Sur Global con una acción climática transformadora que desafía las narrativas dominantes y propicia una reconfiguración real de las políticas climáticas a nivel mundial.
Las recomendaciones de los participantes no solo destacaron la necesidad urgente de un financiamiento climático adecuado, sino también la importancia de garantizar la inclusión de actores no estatales, fortalecer la rendición de cuentas de los países del G20 y promover la innovación dentro de las regiones más vulnerables. Estas propuestas, que abordaron las seis áreas clave de los grupos de trabajo del T20, incluyeron los siguientes puntos esenciales:
Fortalecimiento de los mecanismos de financiamiento climático: Se hizo un llamado claro a reconfigurar las inversiones financieras hacia los sectores de la economía verde y la bioeconomía, priorizando la redistribución equitativa de los fondos, no solo en los contextos de adaptación y mitigación, sino también para abordar las pérdidas y daños causados por el cambio climático. Fue vital la creación de fondos específicos para fortalecer la capacidad de los países en desarrollo, facilitando el acceso a financiamiento destinado a infraestructura verde, soluciones basadas en la naturaleza y protección de derechos de propiedad intelectual. Asimismo, se destacó la necesidad de establecer plataformas y mecanismos de financiamiento dentro del Sur Global, con el fin de reducir la brecha tecnológica y fomentar la innovación local. Tal como expresó Ali Abdullahi, Director de EcoHub Somalia: “El financiamiento es crucial para un futuro sostenible. Sin inversiones adecuadas en tecnologías limpias y estrategias de adaptación, la transición hacia una economía baja en carbono será mucho más lenta y dolorosa”.
Fortalecimiento de la capacidad comunitaria e inclusión: La recomendación clave fue promover la inclusión activa de las comunidades en los procesos de toma de decisiones sobre el cambio climático, particularmente mediante el reconocimiento legal de su participación y su integración en las estructuras de gobernanza. Se destacó la importancia de colaborar de manera transversal a lo largo de las cadenas de valor y empoderar a las comunidades para la adaptación climática, dando un mayor protagonismo a los pueblos históricamente marginados, como las comunidades indígenas y la juventud. Como indicó Yasara Ramanayake, Directora de The Road to Rights en Sri Lanka: “Las comunidades enfrentan problemas a diario. Incluirlas en las discusiones nos proporciona perspectivas diversas que hacen que nuestras recomendaciones políticas sean más prácticas y efectivas”.
Mejorar la rendición de cuentas de los países del G20: Esta recomendación subrayó la necesidad de un enfoque equilibrado que priorizara la colaboración interpaíses, asegurando que tanto los beneficios como las cargas de la acción climática fueran distribuidos equitativamente. Se destacó la urgencia de establecer métricas claras que permitieran verificar el progreso hacia los objetivos climáticos y la implementación de legislaciones vinculantes. Además, se instó a recopilar más datos para fomentar la transparencia y la capacidad de medición en el ámbito climático. Tal como lo expresó Alokita Jha, de la Secretaría de Algodón Orgánico y Comercio Justo en India: “La rendición de cuentas es esencial porque asegura que los países y las empresas sean claros sobre si se están cumpliendo o no los objetivos climáticos, lo cual genera confianza y esperanza en que se está haciendo un progreso real”.
Estas recomendaciones colectivas de los jóvenes líderes del Sur Global reflejan la urgencia de adoptar estrategias climáticas integrales y multifacéticas que trasciendan las fronteras nacionales y las disparidades económicas. En su conjunto, estas propuestas constituyeron un llamado a la acción para los líderes globales, con el fin de fomentar una agenda climática inclusiva y justa, reconociendo que el futuro de nuestro planeta depende de la acción colectiva y del compromiso con un mundo más justo y sostenible.

Comentarios